Quizás este concepto tan básico y
a la vez tan frecuentemente olvidado sea la misma esencia de la parte nuestro
programa de entrenamiento. Pero, ¿qué es realmente la respuesta indeterminada y
como se entrena?
La respuesta indeterminada viene
dada por una pregunta igualmente indeterminada, la reacción a un ataque depende
del ataque, no podemos caer en la trampa de pensar que el agresor (cualquier agresor) se va a comportar
igual que nuestro compañero de entrenamiento.
En este mundo no existe la
versión anticuada de un agresor que nos ayude en nuestra coreografía marcial,
que responda o espere adecuadamente a que finalicemos nuestras técnicas, gran
error es el de seguir entrenando con la idea de que el agresor no es un ser
vivo, espontaneo y totalmente impredecible.
Este concepto, esta idea que tan
solo requiere algo de sentido común es fácilmente comprobable cuando realizamos
un combate abierto con cualquier persona, incluso de forma amigable y sin que
nuestro compañero deba tener conocimientos de lucha, tan solo un mínimo de
agresividad o viveza. Toda nuestra parafernalia técnica se vuelve inútil, todas
las repeticiones coreografiadas tantas veces
pierden su correcto orden de ejecución y todo se vuelve caótico. Imagínate
si el compañero no es tal y es un agresor con conocimientos.
Algunos lectores de este artículo
podrán responderme que cuando uno alcanza la maestría técnica la cosa cambia,
quizás, dentro del marco de todos los factores que se dan en una situación real
el caso de la maestría técnica indudablemente tiene un valor más dentro de esa
suma, pero... ¿y si en vez de entrenar y repetir tanto situaciones determinadas
buscando ampliar la capacidad técnica del alumno hasta llegar a la maestría
entrenásemos desde el primer momento las respuestas indeterminadas? ¿No tendría
el alumno una capacidad más elevada desde el principio de su aprendizaje para
enfrentarse a situaciones reales? ¿No aprendería más rápido si en vez de
repetir patrones entrenase su propia capacidad de improvisación?
Dejando de lado las críticas
constructivas y volviendo a nuestro concepto sobre la respuesta indeterminada,
podemos dar a pensar que tuviésemos una panacea para ella, pero no es así,
nuestro programa no posee una respuesta, lo nuestro es hacer preguntas e
investigar donde nos llevan. Si es cierto que podemos dar algunas pautas dentro
de cada sistema o arte para mejorar en vuestros entrenamientos; convertid
vuestras técnicas en ejercicios de improvisación, quedaos con lo básico de vuestro arte o
sistema y sobre todo entrenad vuestro arsenal siempre basándoos en la no
necesidad de un ataque determinado para una ejecución técnica, es decir, haced hincapié en técnicas que funcionen en
un rango amplio de ataques, no en técnicas específicas que necesiten de un
ataque concreto para su ejecución, mientras más simples sean los movimientos
más sencillo será hacerlos funcionar.
Investigad todo lo que os ayude a mejorar vuestra capacidad de improvisación (no cerraros solo a las artes marciales en vuestros entrenamientos, diversificad), acostumbraros a poner en duda cada técnica, a buscar posibilidades en cada movimiento que entrenéis, no penséis solo en la mentalidad de "estilo" pensad que según el "estilo" respuestas y preguntas son variables.
Investigad todo lo que os ayude a mejorar vuestra capacidad de improvisación (no cerraros solo a las artes marciales en vuestros entrenamientos, diversificad), acostumbraros a poner en duda cada técnica, a buscar posibilidades en cada movimiento que entrenéis, no penséis solo en la mentalidad de "estilo" pensad que según el "estilo" respuestas y preguntas son variables.